Por jornadas de formación docente no habrá clases el Jueves 23.
El Ministerio de Educación programó jornadas de reflexión en el marco de Escuela Abierta para el año lectivo 2019.
En este año, se realizarán diversas jornadas con distintas instancias de formación y metodologías de trabajo.
La primera Jornada Institucional / Programa Escuela Abierta / Segundo Tramo, año en curso, se realizó en mayo y consistió en actividades de reflexión sobre acompañamiento de trayectorias escolares a los alumnos. Los docentes se formaron en el horario escolar, con asistencia de estudiantes, quienes realizaron actividades compartidas.
Este evento, continúa con las jornadas de Escuela Abierta, un programa de formación docente permanente vinculado a las propuestas que la provincia sostiene en los últimos años.
La iniciativa recogió el anhelo de gran parte del colectivo docente, otorgando la oportunidad de una formación situada y en contexto, de acceso gratuito, en horario laboral y con la asistencia de estudiantes en la escuela.
Se propuso transformar las prácticas educativas a partir de la revalorización del saber docente y del abordaje de las problemáticas que día a día atraviesan las escuelas.
A cerca de a las condiciones institucionales que deben darse para que el acompañamiento a las trayectorias se ponga en acto, favoreciendo los procesos formativos se consideró que:
El Ministerio de Educación programó jornadas de reflexión en el marco de Escuela Abierta para el año lectivo 2019.
En este año, se realizarán diversas jornadas con distintas instancias de formación y metodologías de trabajo.
La primera Jornada Institucional / Programa Escuela Abierta / Segundo Tramo, año en curso, se realizó en mayo y consistió en actividades de reflexión sobre acompañamiento de trayectorias escolares a los alumnos. Los docentes se formaron en el horario escolar, con asistencia de estudiantes, quienes realizaron actividades compartidas.
Este evento, continúa con las jornadas de Escuela Abierta, un programa de formación docente permanente vinculado a las propuestas que la provincia sostiene en los últimos años.
La iniciativa recogió el anhelo de gran parte del colectivo docente, otorgando la oportunidad de una formación situada y en contexto, de acceso gratuito, en horario laboral y con la asistencia de estudiantes en la escuela.
Se propuso transformar las prácticas educativas a partir de la revalorización del saber docente y del abordaje de las problemáticas que día a día atraviesan las escuelas.
Resumen
La noción de trayectoria escolar refiere al desempeño de
los alumnos a lo largo de su escolaridad, año a año, observando su punto de
partida y los procesos y resultados del aprendizaje.
Este concepto subraya la importancia de conocer la
historia de cada alumno en la escuela, teniendo en cuenta su pasado y su
futuro.
Mirar la trayectoria invita a redescubrir a la persona en
el alumno, al alumno en su aula con un docente y tiempo determinado, al aula en
la escuela conducida por un equipo directivo que a su vez es acompañado por un
supervisor.
El concepto de trayectoria invita a pensar, y sobre todo
a actuar, para promover la inclusión educativa y garantizar el ejercicio real y
efectivo del derecho a la educación.
La trayectoria escolar no refiere solo a recorridos
personales de los alumnos, sino que interpela y moviliza a las escuelas a
buscar estrategias de trabajo para garantizar la permanencia, la calidad
educativa y el egreso de cada alumno.
Respecto a la implementación se sugirió:
·
Construir con otros actores
institucionales una mirada integral sobre las trayectorias escolares,
individuales y grupales.
·
Reconstruir las trayectorias escolares
integrales de los grupos y estudiantes a su cargo, recogiendo las miradas de
los docentes, de los estudiantes y las familias.
·
Recoger la información sobre el
rendimiento y la asistencia del grupo y los estudiantes a su cargo.
·
Relevar información a través de la
palabra de los jóvenes sobre sus vinculaciones con la escuela, con los pares,
con los docentes y con las normas institucionales.
·
Analizar las trayectorias desde
perspectivas multicausales, que incluyan como variables tanto la enseñanza como
la organización institucional.
·
Detectar en forma temprana situaciones
que puedan poner en riesgo la continuidad de las trayectorias escolares y de
vulneración de los derechos de los jóvenes.
·
Realizar intervenciones integrales que
impliquen la colaboración entre diversos actores institucionales y tutores,
para el acompañamiento a las trayectorias escolares.
·
Diseñar y participar en el desarrollo
de actividades para acompañar el ingreso y el egreso al nivel terciario.
·
Realizar el seguimiento y el apoyo a
los aprendizajes en acciones ligadas a enseñar a estudiar junto con el equipo
docente del grupo a su cargo.
·
Enseñar estrategias generales para el
estudio como organizar una agenda, participar en un debate, organizar los
materiales de estudio, usar la biblioteca y realizar una búsqueda en internet,
entre otras.
·
Orientar a los estudiantes a definir
su propio plan de aprendizaje, elegir la orientación, y las actividades
optativas que ofrezca la escuela.
·
Abordar temáticas que hacen a la
convivencia escolar y a la promoción de los derechos de los jóvenes.
Para pensar las trayectorias en el marco de la escuela es
importante problematizar la noción de fracaso escolar.
¿Cómo se entienden
el bajo rendimiento académico, la repitencia y el abandono al interior de la
escuela?
¿Hay una mirada compartida?
La explicación y supuestos sobre estos temas condicionan
las acciones que la escuela puede imaginar e implementar.
Con cierta frecuencia la repitencia o el bajo rendimiento
se plantean como responsabilidad de los alumnos, tanto a nivel cognitivo como
social. Se afirma que falta esfuerzo o madurez, que hay desmotivación, que las
familias no apoyan el estudio, etc.
El alumno y su familia aparecen como “culpables” de la
situación escolar y la escuela queda en un lugar estático, sin posibilidad de
acción.
En otras ocasiones el fracaso escolar se explica solo en
función de las estrategias docentes, desde una mirada simplista que desconoce
la complejidad del entorno y el desafío al que docentes y equipos directivos se
enfrentan.
Desde esta perspectiva se desvaloriza el esfuerzo de cada
docente para cumplir su objetivo.
Entre una y otra interpretación está la oportunidad.
El fracaso escolar es un fenómeno complejo que no se
resuelve distribuyendo culpas sino asumiendo responsabilidades.
El camino para abordar el problema es constructivo.
Se trata de pensar y repensar la enseñanza y los vínculos
entre escuela y alumno para buscar respuestas pedagógicas que conviertan el
fracaso escolar en inclusión educativa.
Aun cuando algunas variables no se pueden modificar
(entorno social, condiciones culturales, etc.) hay muchas otras que sí son
propias del ámbito escolar y pueden tener un impacto positivo en las
trayectorias.
A nivel institucional cabe revisar, por ejemplo, las
condiciones institucionales de enseñanza, la articulación y coherencia entre
años y niveles, las estrategias y criterios de evaluación, y reflexionar sobre
la mirada que los docentes tienen sobre los alumnos y sus posibilidades de
aprender.
Es en esos factores en los que se juega la posibilidad de
cambio.
El posicionamiento y accionar pedagógico es la clave para
construir escuelas en las que todos puedan aprender.
· Sabiendo que se desarrollan
actualmente acciones destinadas a los estudiantes que ingresan a 1° año? ¿Se
han evaluado sus resultados? ¿Se ha planificado una estrategia de mejora
continua?
· En función del estado de situación analizado,
¿se han detectado problemáticas específicas en los estudiantes de 1° / 3° año?
¿Cuáles son? ¿Qué acciones o estrategias pueden implementarse para contribuir a
resolver estas situaciones?
· Dado que no existe en la escuela un
Proyecto Institucional de Tutoría para el nivel terciario, ¿sería conveniente
desarrollarlo?
De las inquietudes que preocupan a los docentes las más potentes/significativas, fueron:
·
¿Cómo se entienden el bajo rendimiento
académico, la repitencia y el abandono de los estudios terciarios?
·
¿Hay una mirada compartida?
·
¿Podría implementarse un Proyecto
Institucional de Tutoría para el nivel terciario?
A cerca de a las condiciones institucionales que deben darse para que el acompañamiento a las trayectorias se ponga en acto, favoreciendo los procesos formativos se consideró que:
- La escuela debe ser inclusiva, basada en el reconocimiento de las particulariadades de los estudiantes y sostenidas por un oferta de servicios educativos diversos y de calidad.
- Debe recuperar la visibilidad del alumno como sujeto de derecho a la educación. El derecho no deberá limitarse a asegurar el ingreso, la permanencia y egreso sino a construir una trayectoria escolar relevante en un ambiente de cuidado y confianza de sus posibilidades.
- Debe ofrecer una amplia gama de trayectorias educativas diversas y flexibles, con diversos formatos los que tenga lugar la experiencia escolar, sin renunciar a los aprendizajes a que todos tienen derecho, desafiando los destinos que se presentan como inevitables.
Comentarios
Publicar un comentario